Las berenjenas, las vamos a cocer en una olla con agua y sal. ¿Tiempo? Unos veinte, veinticinco minutos. Si la olla fuese a presión... es decir, si yo le pongo la tapa, en cuestión de unos cuatro minutos las tenemos listas. Bien, pues la berenjena nos tiene que quedar muy tierna. Y, mientras, Mariló, te doy espátula en mano y vas a empezar a hacerle el relleno. El relleno de estas berenjenas. Le voy a añadir en la sartén un poquito de aceite de oliva... Ya está calentita, ya la hemos puesto antes... Y añade de momento la mitad de las cebollas que tienes allí. Porque la gracia es que cuando esta berenjena llegue a la mesa sepa prácticamente a todo menos a berenjena. Porque el sabor de la berenjena hay muchas personas que les parece un poquito fuerte.
Y entonces ¿por qué las usas, las berenjenas, si no te gusta el sabor, la textura?
Pero es una manera de tomar, pues, más... más variedad de verduras. Entonces... incluso muchas veces camuflando determinados platos...
Que la berenjena frita es muy rica.
Es muy rica. Y a la plancha, y al horno...
De esta manera que conseguimos que hay muchos platos que, aunque aparentemente no nos gusten, si los servimos de una u otra manera,
nos van a empezar a gustar. Entonces, no podemos decir, como a mi hijo no le gusta la calabaza no le pongo calabaza nunca más.
No, hay que buscar la alternativa.
Éste ya huele a cebollita calentita.
Huele a cebollita, pues ponle la mitad de la zanahoria. La mitad de la zanahoria.
Que molan los cuadraditos.
Ya os enseñaré cómo trocearlas. Muy bien, Mariló.
Seguro que tiene un aparatito y haciendo trampa.
No, no, no eso es a cuchillo. A cuchillo, ¿eh? Ya con la estructura que tu quieras, Mariló.
Y todos los días, familia, ella practica aquí, aunque no la veáis, ¿eh? Cuando nos vamos a publicidad, ella hace las cosas, ¿eh?
Pues bien, la cebolla, la zanahoria, cuando veis que en casa empieza a dorar... añade, añádele poquito a poquito la carne picada.
Yo lo dejo un poquito más, ¿no? En casa... un poquito más.
Sí, en casa... En casa, siempre un poquito más. Hasta la mitad. Con la mitad... Un poquito más... Y la vas como rompiendo. Para que esa carne picada se vaya entremezclando... Muy bien, Mariló. ¡Perfecto! Muy bien. De esta manera, lo que conseguimos es que la carne se vaya mezclando con los aromas de la zanahoria, de la cebolla y a la par, la cebolla y la zanahoria vayan quedando tiernitas. Muy bien. ¿Qué más cositas vamos a poner a ese guiso? Pues mientras Mariló le da allí, dale que te pego, a la sartén, al sofrito... aquí tengo yo unas berenjenas que están totalmente hervidas. Como veis la carne ha quedado blandita, pero la piel está intacta. Es decir, esta piel me va a aguantar perfectamente el relleno y lo que vamos a hacer es, con una cucharilla vaciadora, vamos a ir sacando toda la carne de la berenjena y ello por supuesto que lo voy a añadir a la sartén, ¿eh? Hacemos bien aquí una base como si fuese una barquita. Y mientras que voy picando la carne yo creo que Belén ya nos puede ir contando algo de este guiso, Belén...
A ver... ¿Dónde va la berenjena al cuerpo serrano de cada individuo?
La berenjena va a contribuir al buen funcionamiento del hígado y precisamente por ese sabor amargo, las sustancias amargas de las berenjenas son las responsables de que actúen sobre nuestro hígado, facilitando...
¿Tiene hierro?
La berenjena no. La berenjena tiene mucho potasio y fibra. Y la fibra se encuentra veis en la carne de la berenjena. En todas las pepitas y también en la piel. Por lo tanto, no hay que desperdiciar la carne. Hay que añadirla al... al guiso.
Por eso precisamente... Si Belén dice que aprovechemos la carne sólo faltaba... Te añado ahí, la carne de la berenjena.
Recordar que gracias a esos veinte minutos que ha estado con agua y sal esta carne tiene un sabor muy suave y no nos va a arruinar desde luego
ningún plato.
Pues bien...
Y la cantidad es suficiente, ¿no? porque...
Hombre...
... aunque acabo de echar aquí media berenjena, hablamos de dos berenjenas que vamos a hacerlo para cuatro personas.
Cuatro personas, media berenjena para cada comensal.
Bien...
Hemos puesto cien gramos de carne para cada persona. Luego Belén nos dirá que ésa es una proporción bastante adecuada para que tampoco el plato nos engorde.
¿Qué?
Crearle la cantidad que debemos de tomar en cada ración de carne.
Importante.
Y la carne sí que nos va a aportar hierro.
Te pongo un chorrito de vino tinto. Una ramita de perejil. También vamos a poner albahaca y también puedes añadir el tomate, Mariló. Puedes poner el tomate. Y ese guiso, en casa familia, vamos a dejar aproximadamente que cueza todo pues unos quince minutos hasta que veáis que todo eso se convierte en éste que yo ya tengo aquí. Fijaos cómo ha quedado ¿eh? totalmente espesito y con él...
¿Así se me va a quedar la sartén?
Se te va a quedar así, te lo prometo que,vamos, en cuestión de esos quince minutitos rellenamos bien toda la berenjena y antes de meterla al horno vamos a rallar encima de ella un poquito de queso, el queso chedar que yo decía antes. Cogemos el rallador y ...
¿Y si... y si no gusta el queso?
Pues si no gusta el queso lo que podríamos poner... Se me está ocurriendo, por ejemplo, verduritas muy finitas, muy finitas,
para que nos queden crujientes, por ejemplo... otra opción.
Mira, lo voy a llevar al grill. ¿Tiempo? Pues mirad, tres, cuatro minutos, pero en casa, en cuanto veis que el queso se funde
y empieza a dorar: hora de retirarla.
¿No se tiene que hacer nada más?
No, ya está todo cocinado y bien caliente.
Eso es...
O sea, que es simplemente ese golpe de grill.